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• Miembro desde Jueves, 15 de Febrero de 2018

La liberación femenina, las chicas también pagan por porno
Ya sea porque están muy ocupadas en el trabajo y no tienen tiempo para una relación seria, por capricho o por vivir nuevas experiencias, las mujeres también quieren encuentros porno por webcam sin compromiso, pasarla bien en la cama, pagar y volver a la rutina.
Según un estudio del Centro de Investigaciones del Crimen y la Justicia de la Universidad de Tecnología de Queensland en Australia, en los últimos cinco años se ha triplicado la cantidad de chicas que acuden a los denominados gigolós por cam para satisfacer sus deseos sexuales.
Y España es el quinto país donde las chicas están recurriendo cada vez más a estas prácticas pueden ver el ejemplo en https://www.webcampornotube.com/chicas . Se estima que más de dos mil hombres españoles reciben dinero a cambio de servicios pornográficos. En los primeros lugares se encuentran México, Brasil, Estados Unidos y Reino Unido. Mientras que en las últimas posiciones destacan Corea del Sur, Finlandia, China y Austria, antecedidos por Dinamarca, Canadá y la India.
El perfil
Pero no todas las chicas se dan el “gusto” de pagar por sexo. La mayoría tiene un perfil bien establecido, cuentan con ingresos económicos considerables, son autosuficientes, liberales y profesionales con edades comprendidas entre los 30 y 40 años.
Están dispuestas a pagar unos 170 euros por encuentro, pero si lo que buscan son citas más extendidas como un fin de semana para sentirse queridas y hasta simular que tienen una relación, entonces el pago se incrementa a unos cuantos miles de euros.
Estas chicas van en aumento, generalmente los gigoló atendían a un público masculino que buscaban encuentros con personas de su mismo sexo. Pero las chicas se han metido a este mercado y pueden generar incluso más ingresos y hasta gratos encuentros, toda vez que movidas por su independencia buscan solo lo mejor y hasta exigen unas características específicas, dicho de otra manera quieren un momento con lo que podrían considerar su príncipe azul pero pagado.